Fidalgo (ex de CCOO) considera de “sentido común” retrasar la edad de jubilación a los 67 años
De lo contrario habrá problemas en diez años
José María Fidalgo afirma que retrasar la edad de jubilación de los 65 a los 67 años para combatir el problema demográfico, tal y como ha propuesto el Gobierno, es una medida de "sentido común".
El ex dirigente sindical, en una entrevista al diario El Economista, advierte de que si no se empieza ahora a hacer algún tipo de reforma habrá problemas dentro de 10 ó 15 años, y opina que si la reforma se retrasara otros cinco años, la solución sería "más traumática" y pasaría probablemente por congelar las pensiones "y algunas otras soluciones que no gustarían a la gente".
Fidalgo también se pronuncia sobre la ampliación del periodo de cálculo de las pensiones más allá de los 15 años actuales, subrayando que alargarlo tendría un impacto "mínimo" sobre la expectativa de las pensiones. "Va a haber una tendencia progresiva a ampliar la base de cálculo a toda la vida laboral", dice.
El ex secretario general de CCOO indica que la propuesta del Gobierno está "motivada" y considera que presionar contra la solución de un problema "que ve todo el mundo", como van a hacer los sindicatos, "no estará bien visto".
Fidalgo cree además que a partir de ahora la política económica del Gobierno va a cambiar de dirección y destaca la necesidad de que en España se firme un acuerdo salarial, aunque sea partiendo de la moderación de los salarios. "Que le pregunten a un trabajador si prefiere cobrar menos o ser despedido", apunta.
